El Dr. Jorge Luis Rosado Loria es catedrático de la Facultad de Ciencias Naturales y miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), nivel III desde hace doce años. Originario del Distrito Federal realizó sus estudios de licenciatura en el Instituto Tecnológico y Estudios Superiores en los campus Querétaro y Guaymas, de forma conjunta.

 

Al finalizar, se incorporó al Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán” a trabajar en investigación; posteriormente realizó una Maestría en Ciencias del Metabolismo y la Nutrición Humana por el Massachussets Institute of Technology (MIT) y un Doctorado en Ciencias de la Nutrición por la Universidad de Connecticut, ambas en Estados Unidos de América.

 

En 1999 tuvo su primer contacto con la UAQ, pues impartió algunos cursos para docentes, y fue en el 2000 cuando cambió su lugar de residencia a Querétaro y se incorporó de forma permanente a esta Casa de Estudios. Participó en la creación de la Maestría en Nutrición Humana y del Doctorado en Ciencias Biológicas, que se imparten en Ciencias Naturales y que tienen el reconocimiento del Programa Nacional de Posgrados de Calidad (PNPC) del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT).

En entrevista, Rosado Loria expresó que las líneas de investigación en las que ha trabajado son tres primordialmente. La primera, se basa en el estudio de las deficiencias de vitaminas y minerales en la población de México y algunos otros países y cómo afecta la carencia de éstos en el crecimiento de los niños y la resistencia a las enfermedades. Destacó que el nutrimento que más ha estudiado es el zinc, el cual es un mineral indispensable para que la gente pueda vivir sanamente.

 

“Este mineral participa en muchas funciones muy importantes del organismo, principalmente en la síntesis de proteínas. Cuando hay deficiencia existen consecuencias en la salud, como el retraso del crecimiento y de la capacidad del organismo para resistir enfermedades y en las habilidades cognoscitivas, entre otras. En este sentido, identificamos que entre el 20 y 25 por ciento de los niños mexicanos tienen una deficiencia de zinc y esto destaca en los problemas de salud que tiene la población en México, sobre todo en los pequeños”, afirmó.

Por otro lado, el universitario relató que cuando la Secretaría de Salud Federal la encabezaba el Dr. Juan Ramón de la Fuente y el sub secretario era el Dr. José Narro Robles, él participó como parte del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán” en el desarrollo de suplementos alimenticios que se distribuían por parte del programa que en aquel entonces se llamaba “Progresa”. Actualmente, continua vigente –con otro nombre- y se reparten entre cuatro a cinco millones de dosis diarias.

Además, también desarrolló algunos medicamentos para el tratamiento de anemia en población indígena, así como en un programa de adición de vitaminas y minerales a las harinas de maíz.

Otra de las áreas a la que se ha dedicado en los últimos años en la Universidad, al lado del Cuerpo Académico “Nutrición y Salud”, es el tratamiento de enfermedades crónicas. “Algo que hemos visto es que la deficiencia de vitaminas y minerales –que ocurre en gran parte de la población- lo hace más propenso a tener una mayor deposición de grasa, a la obesidad y por lo tanto mayor prevalencia de enfermedades cardiovasculares o diabetes. Y eso explica un poco por qué en México la obesidad se da de manera muy fuerte en la población pobre, y en la de bajos recursos”, explicó.

Asimismo, el Dr. Jorge Luis ha producido alrededor de 26 patentes, junto con otros universitarios “A final de cuentas le permite al grupo tener la explotación directa de lo que hace, no quiere decir dinero necesariamente, sino simplemente aplicarlo. Al protegerla, uno tiene la propiedad, esa es una parte que nuestro grupo le hemos dado especial énfasis”, comentó.

Entre los planes que tiene, el catedrático aseguró que continuará con la investigación y docencia, siempre involucrando a estudiantes en sus trabajos. Además, dedicará tiempo a la publicación de algunos libros y seguirá con el fortalecimiento del Cuerpo Académico al que pertenece, a la Facultad de Ciencias Naturales y a la UAQ: