Tras un estudio en la región del Semidesierto hace unas semanas a petición de los propios habitantes, un grupo de universitarios realizaron un diagnóstico acerca de la situación del agua en los municipios de Colón y Tolimán, pues existe incertidumbre respecto al riego de más de 30 mil árboles de fruta, que a falta de un manejo adecuado, podrían perderse, dio a conocer el Dr. Raúl Francisco Pineda López, director General del Centro de Capacitación en Cuencas e investigador de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ).
 
Por esta razón, el Dr. Pineda López indicó que entre las propuestas están, por ejemplo, por medio de pipas garantizar un riego mínimo óptimo; así como atender una serie de buenas prácticas para guardar la humedad en los árboles el mayor tiempo posible; sin embargo, esto apenas ayudaría a la sobrevivencia de los árboles y no a la producción.

También, continúo el especialista, se propone implementar un nuevo sistema de distribución de agua en la región, lo cual ya se platicó con los pobladores, las autoridades y la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), pues dadas las deficiencias que presenta actualmente, es necesario incorporar nueva infraestructura que abone a mejorar esta situación.
 
"El sistema actual de canal de riego a cielo abierto, aunque es de concreto, tiene muchos problemas de fugas, se pierde el agua, y es necesario introducir un tubo; un tubo que vaya controlando más la cantidad de agua en las presas", expresó el Dr. Pineda López.  
 
De acuerdo con el investigador, este es un tema que debiera involucrar a autoridades de los tres ordenes de gobierno y otros organismos, por lo que junto con el Centro Transdisciplinario de Incidencia Ambiental, de la Facultad de Ciencias Naturales, se crea un proyecto que permita la concurrencia de fondos provenientes de grandes fundaciones para lograr el recurso para este proyecto. Por lo pronto, esta semana se reunirá el grupo de riego con distintas autoridades para plantear todas estas ideas.
 
Por otra parte, mencionó que una estrategia a largo plazo sería que por medio del manejo de cuencas se logre captar mayor humedad y que esta permanezca durante más tiempo, justo en los lugares en donde están ubicados los huertos.
 
La preocupación surge después de que la temporada de lluvia no fuera la mejor y dejara importantes rezagos en la captación de líquido en las presas de dichas demarcaciones, pues de 13 millones de metros cúbicos que reciben cada año, actualmente apenas cuentan con un millón cada una.
 
"Necesitamos poner mucha atención al agua y a las cuencas generadoras de agua que tenemos en el estado, porque en el futuro necesitamos manejarlas de tal forma que garanticemos la cantidad y la calidad de agua que se requieren dentro del contexto del derecho humano al agua, pero también pensando en la cuestión de sostenibilidad. Necesitamos revisar el uso del agua en todo el territorio queretano", agregó.