La Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Querétaro clausuró la generación 2008-2012 de las Licenciaturas en Odontología y Medicina General, de las cuales se graduaron 30 y 46 profesionales de dichas disciplinas, respectivamente.

 

 

 

La titular de la Secretaría de la Rectoría, Dra. Rebeca del Rocío Peniche Vera, aseguró que para esta Casa de Estudios representa un orgullo la formación de especialistas en la salud, en quienes se fomenta un alto sentido de humanidad y responsabilidad, por lo cual deben ser dignos representantes de la UAQ.

 

 

 

Por su parte, el director de dicha unidad académica, Dr. Javier Ávila Morales, felicitó a los graduados y aseguró que desde el momento en que decidieron ser médicos y odontólogos iniciaron un proyecto de vida para el que tienen que estar dispuestos las 24 horas del día, los 365 días del año.

 

 

 

“Todos pueden fallar, menos ustedes. Nuestra Institución, orgullosa, genera médicos comprometidos, en primer lugar con ustedes mismos, para lleguen hasta donde quieran, y sé lo que van a lograr. El otro compromiso es con la sociedad y dentro de ésta con nuestros pacientes, ellos no van a saber de todo este esfuerzo, los pacientes van a saber de compromiso, de códigos de ética y de la moral que ustedes deben procurar”, señaló.

 

 

 

En la ceremonia de entrega de constancias, que se celebró en el Aula Forense de la Facultad de Derecho, también se otorgó el Premio a la Excelencia Académica a los alumnos que concluyeron sus estudios con los promedio más destacados. De la Licenciatura en Odontología, Alejandra Dorantes Cortés recibió este reconocimiento; de la Licenciatura en Medicina General, lo hizo José Luis Montiel Zamora.

 

 

 

“Gracias doctores por todo el aprendizaje que hemos tenido de ustedes, por su dedicación, esfuerzo y entrega al enseñarnos cosas que los libros de texto nunca mencionan, por no quitar el dedo del reglón y hacer que nos esforzáramos día a día”, expresó Alejandra Dorantes.

 

 

Por su parte, José Luis Montiel Zamora, a nombre de sus compañeros, también expresó su agradecimiento a la Facultad “por ser el mejor lugar para aprender medicina, por hacer exámenes incontestables, por tener el más alto nivel de exigencia y por enseñarnos que tratándose de seres humanos no se permiten errores”.