La Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPS) de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) fue sede de la presentación de los documentales: Los árboles no dejan ver el bosque, Piripkura y Hasta los dientes.

Dicho material forma parte la 13ª edición de Ambulante, Gira de Documentales, que en el caso de la entidad queretana se presentó en distintos lugares, entre estos la Máxima Casa de Estudios del estado.

La directora de la FCPS, Dra. Marcela Ávila-Eggleton, celebró la existencia de estos espacios dentro de la unidad académica, en donde se promueve en los universitarios la reflexión sobre la realidad.

“Es un buen pretexto para reunirnos y para hacer a lo que estamos llamados en esta Facultad, que es discutir para criticar la realidad y presentar alternativas o argumentos que desde nuestras diferentes perspectivas nos permiten una convivencia mejor”, afirmó. 

Por su parte, el Dr. Antonio Zirión Pérez, representante de Ambulante, agradeció a la Universidad por la apertura para recibir actividades artísticas y culturales como parte de la formación académica.

“Ambulante tiene la misión de llevar cine documental a diferentes rincones del país, ciudades y estados. En esta gira estamos recorriendo ocho estados lo largo de dos meses, utilizando el documental como un vehículo para generar reflexión, diálogo, comunidad, transformación social”, refirió.

El primer documental que se exhibió “Los árboles no dejan ver el bosque”, relata cómo los habitantes del municipio de Cherán, Michoacán, tras ser hostigados por miembros del narcotráfico que extorsionaban a la población y destruían los bosques, se armaron con piedras y palos para desterrar al crimen organizado.

Respecto al trabajo “Piripkura”, presenta a los últimos tres miembros del pueblo indígena Piripkura, que viven como nómadas en la selva amazónica y su única manera de proteger el territorio es comprobando que todavía está habitado por ellos.

En cuanto al documental “Hasta los dientes”, retrata como en el 2010, el Gobierno mexicano anunció la muerte de dos supuestos sicarios, armados hasta los dientes, pero en realidad se trataba de dos alumnos de excelencia del Tec de Monterrey, quienes fueron torturados y asesinados por los militares.